Ella nació sin suerte
Con sólo 20 años ya sabía lo que es la muerte
Quedando viuda con tres hijos
Que acariciaba constantemente
Mientras pedía al cielo
Que le un poco de suerte
Trabajaba de casa en casa
Olvidando lo joven que aún era
Preocupándose de sus hijos
Primero que ella
Para darles una profesión
mientras viviera
Olvidando el cansancio
Que por minutos,
se apoderaba de ella.
Con gran sacrificio y desvelos
Logró que sus hijos, cumplieran sus sueños
Uno era Arquitecto, el otro abogado.,
La otra., una niña que escribía poesía
de la cual siempre decían
que no serviría ,que era una loca
Que nunca crecería
Que vivía de mamá, que eso no la ayudaría.
Con el paso del tiempo
Los hijos se fueron
A buscar otros caminos
Cruzando los cielos
Abandonando a la madre
Sin importar lo que ella hizo
dejandola muy triste
En un mundo, tan mezquino
Mientras los años pasaban
La niña creció, escribía poemas
Con gran devoción
Gustando a la gente
Llamando la atención
Recitando poemas
Su vida cambió
Con gran emoción, su sueño cumplió
Comprarle a la madre
Lo que siempre anhelo
Una casa preciosa, con jardín y rosas
No sin antes decirle,
Que era la más hermosa
Que era la reyna de su corazón
Un día de pascua
Los dos hermanos regresaron
El arquitecto, su castillo vio caer
El abogado, su juicio vio perder
regresando a casa
Con la idea de ver
Abrazar y pedir perdón, a la madre
que hace tiempo, Dios mandó a ver
Y en su lecho de muerte
Solo a ellos quería ver.
Solo queda la loca soñadora
Que da gracias, al don que Dios le dio
Escribiendo poesías noches y días
Para solventar los gastos
Que día a día, crecían
Producto de la enfermedad
Que su madre padecía.,
Pero el destino,
se la arranco.... un día
Ahora somos tres
La vida nos a juntado atrás vez
Doy gracias a mi Dios
Por verlos después
Aunque mi madre ya no este
Somos una familia
Y eso.... Yo lo sé.
Atiery Valladolid
03 enero 2018
PERÚ
Derechos reservados 01/03/2018
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