Cosas del amor
Para todas aquellas personas que
creen en esta misteriosa palabra
El amor es como pétalo de rosa,
frágil, como un costoso cristal,
es palabra, para unos hermosa
para otros, un aciago vendaval.
El amor, es ese fuego en el alma,
que nace, como ardiente pasión,
que molesta, el sentir y la calma,
dejando angustias, en el corazón.
El amor es karma que alucina,
es la tenue, claridad de un día,
es cuerda que ata y que domina,
enemigo, que muestra su porfía.
El amor es como un quieto río,
blando y apacible en el verano,
tormentoso, en el invierno frío
y navegable, al llegar al llano.
El amor es la fuerza que mueve,
azules mares y altas montañas,
es el influjo de un pasado breve,
que al irse lamentas y extrañas.
El amor, es el opio que alucina,
pócima que mata y que castiga,
droga, que con otro ser termina,
excitante luz, que jamás hostiga.
El amor es equilibrio en el vacío,
que controla todo el bien y el mal,
lo que a veces rompe el albedrío,
también gracioso y rubio trigal.
El amor, algo dúctil y maleable,
es el que siempre llega al final,
semilla, madura y perdurable,
ave canora, formando un nidal.
El amor es sueño indestructible,
un horizonte, que no tiene final,
careta, donde anida lo indecible,
fuero interno, abierto y natural.
El amor, es palabra que domina,
una esperanza verde como hiedra,
la suerte que disfrazada camina,
por senderos, de tallada piedra.
El amor es alimento de tristeza,
no quise conjugar el verbo amar,
alguien se alejó por mi pobreza,
poniendo mi barca en alta mar.
Gerardo Vásquez Almazán
Tumbaco, Quito, Ecuador
Febrero 7 del 2020
(D.R.A.)
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