Y APARECISTE TÚ.

 Y APARECISTE TÚ.

Al momento se acercó el sentimiento
en buena hora acechando a mí corazón.
Tu amor me sacó el dolor
de mi alma que partida desangraba.
Porque en tu alma el dolor jamás se ceba.
Fácil resbala ahora por mi piel
fui por tiempo envuelta en hiel.
Hoy siento el calor,
ya no hay dolor.
Nunca toca fondo el alma,
si un aire nuevo llega
pasa otro y se lo lleva
y todo el ser se renueva.
Como lo has logrado tú,
en hora buena.
Ya los ojos no se inflaman
por lágrimas vertidas.
Sediento del aliento de tu boca,
hoy a mi me toca...
quitar mi corazón contra las puertas en llamas.
Pues has llegado tú,
cual embajador del ángel del amor.
Tú amor me sacó el dolor
sintiendo en mi piel,
en loco atardecer
al hombre fiel que vino por mí
colmando mi corazón.
Mi alma enciendes con implacable saña.
En alta voz mi corazón dice
Tu amor me sacó el dolor.
Carmen Bonpland.
D.R.A.Safecreative
Gualeguaychú, Entre Ríos, Argentina.