Almas errantes.
¡Ya no hay que insistir, ya no!
Si algo se termina no hay que
volver a la misma vereda.
convicción hacia esos amores
errantes, esos que se motivan
con un nuevo rostro o algún
otro motivo que les aparezca.
Esos seres son inconstantes,
se emocionan cada vez que les
endulzan sus fuentes, su caldero,
aman cada vez que una presa
se funde en sus reservas, tienen
agudo el sentido para detectar
otras sendas, se enamoran hoy
mañana y hasta para siempre.
Cuidado con esos quereres,
parecen verdaderos, pero son
dagas afiladas, no sé entregan
sólo buscan refugios cómo
alma errantes, almas en pena.
Sus gargantas son serpientes,
que buscan labios insurgentes.
Ya no me fío de amores de grana,
de insistentes alabanzas, de teas
encendidas perfectamente mágicas.
Ya no creo en cometas que se alzan
al alba. Ay de esos inocentes oídos,
prestos para alagos, sin saber que
sólo serán sosiego , sin entender que
sólo tienen un fatídico destino.
Ay corazón de fuego, ay alma...
frágil, incontante, jugaste a ganador,
hechizo... se ha alzado en tu nido.
Ay corazón de inocentes preludios,
preso de consejos de seda, preso de
de ilusiones de una carrera intrépida.
Ay alma no atiendas palabras bellas,
no te fies de quereres... volcánicos.
*** Nury Martínez ***
Septiembre - 26 - 2022
Derechos Reservados Chile.
Colección " Hechizos "
PD: Éste es un escrito muy especial para mí.
Mis saludos queridos lectores.
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