DESCALZA

 DESCALZA

Esperé descalza,

encendida

desde mis sueños.

Al despertar,

ataviada,

me encontré

al borde,

en el extremo de mi instinto,

divisando solo

espesa bruma.

Esperé

como espera ansiosa,

entre sedas,

una novia a su amante,

la primera vez.

Aguardé en silencio

y me contuve

entre las rejas,

tratando de buscar

tu encendido deseo

en el horizonte

lleno de neblina.

Sosteniéndome firme,

en puntas de pie,

aún descalza,

asomada al balcón

frente a tu osadía,

aguardé para ver

si adivinaba tu piel enardecida,

empapada de rocío,

y esa caricia sin censura,

prometida tantas veces.

Me quedé

esperando de puntillas

en la noche

para intuir

si estabas también deseándome.

Te esperé

sin saber

si me esperabas,

contando los minutos

que me separaban

de tu sin cordura.

Esperé,

y cuando el badajo

de la campana

que hacía sonar

mi reloj en la pared

dio la medianoche,

de prisa

partí a tu encuentro.

Me calcé de cenicienta

y rápidamente

subí a un carruaje

que me llevó

a tu luz.

Sorprendida bajé sin abrigo

y allí me esperabas

con el calor de tus venas.

A tu mirada corrí,

sin haber perdido mi zapato...

Diosma Patricia Davis

D.A.R. 2021

28/04/2021

Argentina