Qué cuesta

 Qué cuesta

Qué cuesta? si vivo, vivir libre!

Qué cuesta, si vivo, ser honesto,

Qué nos cuesta, si en el amor, el amor puro?

Qué cuesta? ser yo, respetándote, y amándote?

Qué cuesta? amarnos, y respetarnos?

Qué cuesta? si hay pan, el compartirlo, para que a nadie le falte?

Qué cuesta? hacer las cosas bien?

No es mejor aun? Hacer las cosas bien, y ser honrado?

No pule nuestra esencia, y nos da vida??

Qué cuesta? Mirar la Vida, y no la muerte?

Qué cuesta? Tratar de vivir, amandoté

Qué nos cuesta?

No es mejor? que el poder lúgubre, y unas monedas…?

Qué cuesta, ganar la carrera, si otro va atrás con silla de ruedas?

Vale la pena, alcanzar, pisándoté?

Que no nos cuesta, querer ser honrados, y honrar la vida?

Acaso, se nos amenaza, con el ir presos?

Acaso, qué perdemos??? Acaso, nos faltará algo, si no lo hacemos??

Qué vale más, que un mundo limpio y un mundo sano? Mirarte a los ojos, natural y bello, qué cuesta más?

Acaso nos hemos propuesto, romper algún récord?

Acaso, lo innoble, lo chato, lo vulgo, lo malo, -no lo que ignoramos! que es la sed

que tenemos que preservar, Siempre!!!-

acaso, lo vulgar, lo grosero, lo malvado, la delincuencia,

el querer ganar las cosas a costa tuya, sin tener en cuenta Tu felicidad, Adónde nos conduce???

Acaso ganaremos el premio, al mejor impostor?

A quién queremos representar? Ó que nos represente?

Acaso queremos mejorar, la vida de los demás? Mintiendo?

Mintiéndoté?

Agrediéndonos? Robándonos? Cuál es nuestra ganancia?

Si no creemos en algo Mayor, que nuestro peso en oro,

cuál será nuestra meta?

Acaso el dinero –si es uno sólo el planeta, para todos- comprará algo más

que lo que limita la Vida?

Podrán ver más lejos nuestros ojos?

y si es así: No vale la pena ver en cambio, cosas hermosas?

Nos seguiremos robando, matando, después de la Muerte?

Qué se entiende por: Vida?

Qué significa, la sangre, que se derrama?

ó la ausencia, de los que matamos?

A dónde queremos llegar todos y cada uno de nosotros?

A dónde?...

Se lo pregunto también

a todos los Gobiernos

del mundo…

Alejandro Rodrigo Flagel