Cuanto cuesta a veces sonreír,
cuando te sientes tan mal,
haces un esfuerzo enorme
porque solo tienes deseos de llorar.
Y ríes para acallar tu dolor
por Dios que nadie lo vaya a notar
tragandote tus propias lágrimas
silenciando las delante de los demás.
Tu risa es alocada y ruidosa
te afanas por ocultar
que te estás muriendo
en medio de tu soledad.
Esbozas una sonrisa
te escondes tras una coraza
no quieres hacer sufrir
y tu sufrimiento disfrazas.
Cuanto cuesta Dios mío
el poder disimular
fingiendo que estás bien
cuando ya no puedes más.
Pero sigues adelante
con tu risa fingida
siempre con buen talante
y tus lágrimas escondidas.
Despues de todo
así es la vida
llorar en silencio
en medio de farsa risa.
Pero cuanto cuesta...
Autora :Pepi Corchero R.
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