Los universos alternos.
Cuando Leo habla al cel de Casiopea,dos universos se intersecan,su voz se logra oír por los dos aparatos,cada quién en su mundo,Leo entra en el universo que circunda Casiopea,a pesar de sus deseos también está en su mundo.Lo mismo sucede con Casiopea,ella al escuchar la voz de Leo se traslada por el auricular en ondas electromagneticas a la velocidad de la luz y puede conectarse en el universo que circunda Leo.Los dos en un universo,las dos en el otro,al mismo tiempo,dos universos para el uno,dos universo para otro.La ironía de los universos alternos que no entienden los amantes,a pesar de ocuparse el mayor número de horas viviendo de esta forma, no tienen idea de que sucede.
La singularidad del universo y la teoría de la relatividad son conceptos que solo locos manejan,ellos acarician las mejillas de la inocencia con su rasposa lengua y simulan amar como el mundo ama.
Dos gatos maullan en la noche y dejan tirada la vergüenza como sombra pegada a las paredes,para jugar al sexo,solo el timbrar del teléfono logra espantar a las lagartijas y el perdón de los felinos en aras del amor...
Cuando Leo habla al cel de Casiopea,dos universos se intersecan,su voz se logra oír por los dos aparatos,cada quién en su mundo,Leo entra en el universo que circunda Casiopea,a pesar de sus deseos también está en su mundo.Lo mismo sucede con Casiopea,ella al escuchar la voz de Leo se traslada por el auricular en ondas electromagneticas a la velocidad de la luz y puede conectarse en el universo que circunda Leo.Los dos en un universo,las dos en el otro,al mismo tiempo,dos universos para el uno,dos universo para otro.La ironía de los universos alternos que no entienden los amantes,a pesar de ocuparse el mayor número de horas viviendo de esta forma, no tienen idea de que sucede.
La singularidad del universo y la teoría de la relatividad son conceptos que solo locos manejan,ellos acarician las mejillas de la inocencia con su rasposa lengua y simulan amar como el mundo ama.
Dos gatos maullan en la noche y dejan tirada la vergüenza como sombra pegada a las paredes,para jugar al sexo,solo el timbrar del teléfono logra espantar a las lagartijas y el perdón de los felinos en aras del amor...
Roberto Reynaga E.
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