Comparación
Me encuentro con el corazón y el alma en calma, siento como el cariño de mi familia y amistades me llega al corazón y me siento feliz y bendecida.
Me pongo a pensar en la semejanza entre los humanos y la naturaleza, que así como las semillas de la flor diente de león que al soplarle salen volando para nacer en otro lugar.
Se parecen a los hijos que están agarrados a la protección paterna, y cuando ya están listos para volar se desprenden del de la mano para buscar su propio hogar en la vida.
Como las semillas de esa flor que vuelan a otro lugar dejando solo unas baritas secas que les dieron formación y libertad.
Siempre pienso y comparó la vida del ser humano con la naturaleza que tienen algo semejante ambas partes, pues todo se reduce al firmamento y a la humanidad, porque tantas personas hay en la tierra como estrellas en el cielo, el sol que nos da la vida como nuestra madre que nos cuida.
Autora , María Esther Benítez flores
Sonora México , 06/06/2017
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