Besos que siembran
nenúfares
en las olas del cabello;
y perlan esmeraldas
en los palacios
del viento.
Besos que enlazan
a la corriente pránica;
exaltan
con azul pincelada
la nota akásica,
que tensa el pentagrama.
Besos eurítmicos,
que acrisolan
la miel de la esperanza,
venciendo
la farsa mundana,
enarbolando
con hondo sentimiento,
la flama de los astros,
sobre la piel sedienta
del desierto humano.
Muy agradecida, Milagros!
ResponderEliminarGracias por compartir mis letras!