GRITOS SIN VOZ
TE LLAMAN PANDEMIA,
YO DESOLACIÓN,
TORTURAS Y MUERTES SIN NINGUNA COMPASIÓN.
SUEÑOS ROTOS, FRUSTRADOS,
LLANTOS DE ALMAS, QUE SIN QUERERLO
ESTA TIERRA VAN DEJANDO,
VAGANDO HACIA OTRO LUGAR DONDE ENCONTRARÁN LA PAZ.
UN LUGAR DONDE NO EXISTA LA PANDEMIA,
NI ÉL HAMBRE, NI LAS GUERRAS,
OTRO MUNDO SIN MALDAD.
SUENAN CAMPANAS DE GLORIA.
CIERRO LOS OJOS Y SUSPIRO,
ALGO NUEVO FLORECE A LA ORILLA DEL RÍO,
EL SUSURRO DEL VIENTO, UN SUSURRO DIVINO.
CAYÓ DEL CIELO UNA ESTRELLA BRILLANTE Y VELOZ,
ANUNCIANDO PARA TODOS UN MUNDO MEJOR.
SIEMPRE NOS QUEDARÁ LA ESPERANZA.
JOSEFINA CAMPO
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