Llena mi pozo.
Desde un dia cercano
entre las nubes estaba
la niña que tengo a mano,
y de las nubes la bajaba.
Sabía que me esperaba,
es mujer que guardo ufano
y estará mientras aguarda
que le ceda y dé la mano.
Nada me pide y me da
todo lo que necesito.
Su vida es solo mi vida
y sacia mi gran apetito.
No renuncia de nada,
ni yo pretendo ser ciego,
es libre cada mañana,
y elige siempre mi templo.
Cuando eleva su mente.
Cuando piensa lo que pienso
es decidida y valiente
y me busca con gran deseo.
Es regalo del destino,
es puro pulido diamante,
me tiene siempre atendido
y nunca renuncia a tenerme.
Seré muy buen compañero,
le dejo mi puerta abierta.
Siempre le soy lo primero;
deseo que en mi cuerpo invierta.
No hay otras palabras
que no sean pasión y gozo
Todas ellas las hilvana
hasta rebosar mi pozo.
No te vayas nunca de mi,
te siento como me sientes.
No me marcharé de ti
aunque mucho me atormentes.
jaime alfambra
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